Dan Galai ha estado esta semana en Madrid, invitado por Andbank, para contarnos cómo se creó en los 80 el índice VIX de volatilidad, una de las herramientas que miles de inversores y operadores siguen como referencia para tratar de predecir los movimientos del mercado, entender las fluctuaciones del mismo o tomar posiciones. El índice se utiliza como medida de la expectativa de volatilidad del mercado bursátil implícita en las opciones del índice S&P 500, calculada por el Chicago Board Options Exchange (CBOE). Galai, co-creador del índice VIX junto a Menachem Brenner, subrayó que el VIX, considerado por muchos un indicador del miedo existente en el mercado, «no se basa en sentimiento, sino en dinero desembolsado, en opciones at the money». «El mercado en sí no es volátil -apuntó en su intervención-, el índice VIX es mucho más volátil; es una herramienta arriesgada que registra cambios muy abruptos”. Por ello, el profesor Galai destacaba: «Las opciones de volatilidad no pueden ser usadas por cualquiera, hay que utilizarlas con mucho cuidado, comprender bien las condiciones del contrato y evaluar riesgos y retornos. Si no estás preparado, no lo hagas».

Galai, presidente de Sigma Investment, socio de Andbank en Israel, analizó los gráficos que muestran que la volatilidad del mercado permanece en sus niveles mínimos en los últimos años; «cuando suban los tipos de interés, la probabilidad de que la volatilidad aumente crecerá, pero ahora la probabilidad de una subida abrupta es baja«. Galai se preguntaba: «¿Puede el VIX predecir el mercado? En parte sí, existen correlaciones negativas muy fuertes entre el VIX y el subyacente, pero a nivel micro no se puede ganar así al mercado porque el mercado es competitivo».