El tenis en silla de ruedas es uno de los deportes más practicados y competidos a nivel mundial entre los deportistas paralímpicos. Es muy difícil colarse entre los mejores para participar en la cita olímpica y, más aún, alzarse con el triunfo. ¿Quiénes han sido los privilegiados en Londres?

En individuales, los reyes de las Paralimpiadas 2012 han sido el japonés Shingo Kunieda y la holandesa Esther Vergeer. El japonés venció en una disputada final al francés Stephane Houdet, número 1 del Mundo. En femenino, se cumplió el pronóstico: venció la líder del circuito. Tanto Kunieda como Vergeer fueron ya medalla de oro en Pekín 2008.

El tenista nipón conquistó la medalla de oro en dos sets, 6-4 y 6-2. Shingo Kunieda es uno de los grandes tenistas en silla de ruedas, aunque nunca había conseguido ganar en Wimblendon. Por fin, vence en Londres, pero en la cita paralímpica. A sus 28 años es el número 3 del Mundo, a muy pocos puntos del segundo, el holandés Scheffers.

Para Kuneida, Londres 2012 ha sido el escenario para volver a mostrarse el mejor, pues entre 2007 y 2010 fue el tenista con más títulos. Como hizo Roger Federer también en Londres, aunque en este caso en el torneo de Wimblendon y sin poder certificarlo en la cita olímpica.

Vergeer agranda su leyenda

La tenista holandesa es una auténtica leyenda viva del tenis en silla de ruedas. En Londres venció en la final por la medalla de oro individual a su compatriota Aniek Van Koot 6-0 y 6-3.

Esther Mary Vergeer es la reina del tenis en silla femenino. ¿Se puede encontrar otro dominio igual en alguna disciplina deportiva? Sus números marean. Ha sido medalla de oro en individuales en las cuatro últimas Paralimpiadas (Sydney, Atenas, Pekín y Londres), y también en dobles salvo en Pekín 2008, donde fue medalla de plata. A sus 31 años lleva desde 1999 siendo la número 1 del circuito, y acumula 42 Grand Slam.

Dobles

Los suecos Olsson y Vikstrom, que fueron medalla de plata en Pekín 2008 y que eliminaron a los españoles Dani Caverzaschi y Quino en segunda ronda, se han subido al primer cajón del podium. En la final superaron con claridad a la pareja francesa Cattaneo y Peifer, 6-1 y 6-2.

En femenino, como era de esperar, reinó la holandesa Esther Vergeer, acompañada de Marjolein Buis. Ganaron en la gran final a las también holandesas Griffioen (bronce en individuales) y Van Koot (la medalla de plata en individuales).

Holanda es la gran potencia en tenis en silla femenino. Las holandesas coparon las tres medallas de individuales, y las tres de dobles.