Una buena comida, un buen servicio, variedad y calidad… Son algunos de los factores en los que nos fijamos cuando acudimos, y cuando regresamos, a un restaurante. Sin embargo, en muchas ocasiones, la degustación gastronómica es lo de menos y priman otros factores que hacen que el local sea exclusivo: la decoración, el ambiente o, incluso, la ubicación. ¿Te imaginas comer bajo el mar? ¿O suspendido a 50 metros en el aire? Pues es posible. Y aquí te mostramos algunos de esos restaurantes en los que la comida, casi con total seguridad, pasará a un segundo plano.

Ithaa Undersea

Está en las Maldivas y cuenta con una peculiaridad que, desde la propia entrada, sorprenderá a sus comensales: se encuentra ubicado a cinco metros bajo el nivel del mar. Las vistas que ofrece son espectaculares, con una panorámica de 180 grados de los jardines de corales que lo rodean, la vida marina y un sinfín de peces que revolotean a nuestro alrededor. Ya en el propio nombre del restaurante se aprecia su seña de identidad. Ithaa significa “perla”. Su especialidad es la comida contemporánea europea y entre sus platos estrella destacan el caviar Malossol Imperial con crema agria o el blinis de patata y jurel con risotto de azafrán. Además, ofrece la posibilidad de reservarlo de manera privada, para desayunos, bodas u otras ocasiones especiales.

Dinner in the sky

Y del fondo del mar nos vamos ahora a las alturas. Dinner in the sky es un restaurante belga que ofrece a sus clientes la posibilidad de comer desde una perspectiva diferente. Concretamente, mientras permaneces suspendido a 50 metros del nivel del suelo sujetos a una grúa. Y además, en el lugar que nosotros elijamos. Aunque su procedencia sea belga, la oferta no queda limitada a este país, ya que ofrecen sus servicios en docenas de países. Y las posibilidades también son muchas: una plataforma redonda donde realizar un concierto y otra al lado con capacidad para 22 personas; una obra de teatro; desfiles de moda… Y por supuesto, un restaurante: una mesa con capacidad para ocho personas y un menú exquisito.

Muru Pop Down

Y volvemos hacia el suelo. Aunque un poco más abajo del nivel normal. Esta vez en Finlandia, done el restaurante Muru Pop Down ofrece sus exquisitos platos a 80 metros de profundidad. Y para más atractivo: en una cueva de roca caliza. Salmón, solomillo de ternera al Pernod o crujiente de manzana son algunas de sus especialidades.

Dans Le Noir

El slogan de esta cadena de restaurantes, que cuenta con un local en Barcelona, bien podría ser “Bienvenidos a la más absoluta oscuridad”. Y es que precisamente así se encuentra el local, sin apenas una tenue luz. ¿El objetivo? Centrarse en el resto de los sentidos y disfrutar al máximo del placer de la comida: el sabor, el olor, la textura… Todo se potenciará cuando nos falta ver qué es lo que comemos. ¿Te preguntas cómo hacen los camareros para servir a oscuras? La respuesta está en otras de las peculiaridades del restaurante: todo el servicio del local es ciego.

A380 Sky Kitchen

En Taipei, en China, se encuentra este restaurante que debe su nombre al avión. Y todo está ambientado como si estuviéramos volando en uno de ellos: primera clase y turista, señal de abrocharse los cinturones, las bandejas donde se sirve la comida, el carro que transporta las bebidas, el traje de las camareras simulando al de una azafata de vuelo… ¡Bienvenido a bordo!