El wealth management, traducido en sentido literal por “gestión de patrimonios”, es un servicio de asesoramiento integral de las finanzas destinado a quienes buscan gestionar de una forma completa, avanzada, personal y eficaz sus inversiones y consolidar su patrimonio. Es decir, el wealth management implica la planificación financiera de toda la vida del sujeto en cuestión, analizando sus necesidades y objetivos económicos actuales y futuros.

Esta planificación integral cuenta con tres pilares fundamentales:

  1. La gestión privada de los bienes y recursos disponibles del sujeto
  2. La planificación financiera en el largo plazo
  3. Y la gestión de su portafolio o cartera de inversión

A ellos se suman la formación, la administración, la protección de las finanzas y la transmisión de patrimonios de los clientes.

Todas estas funciones recaen en el trabajo de expertos asesores en materias financieras, administrativas y tributarias, conocidos como wealth managers, que analizarán la situación personal del cliente e identificarán debilidades y necesidades.

Los wealth managers orientan su visión según estas necesidades del cliente para encontrar la mejor combinación de riesgo-retorno. El objetivo final es la planificación de una solución integral, flexible, duradera y alineada con el análisis previo de necesidades, de forma que quede cubierto el asesoramiento financiero, la protección de activos, la planificación tributaria sucesoria, los seguros y los servicios bancarios del cliente de wealth management.