El líquido elemento está esta semana de celebración. Llega el 22 de marzo, un nuevo día mundial del agua y con ello el recuerdo de que hay 7.000 millones de personas que alimentar en el planeta, de las que 1.290 millones viven en extrema pobreza, según las últimas estimaciones del Banco Mundial. Para el año 2050 Naciones Unidas espera un incremento de la población de 2.000 millones. Muchas bocas a repartir, y si nos hacemos eco de las últimas estadísticas a las que hace referencia esta organización, todas las personas beben de media entre 2 y 4 litros de agua a diario, aunque la mayor parte está incorporada en los alimentos que consumimos. Con estos datos no es de extrañar que el dicho popular de arrimar el ascua a la sardina de cada uno tenga pleno sentido hoy día. Y es que aprovechar tal cantidad de bocas sedientas en beneficio propio está de moda, y si no que se lo pregunten a las grandes empresas gestoras del ciclo integral del agua en España.
En la actualidad, la Asociación Española de Empresas Gestoras de los Servicios de Agua a Poblaciones (AGA), fundada en 1995, es la encargada de promover y defender los intereses comunes de las empresas de servicios relacionadas con el ciclo integral del agua. Las empresas asociadas prestan servicios de agua urbanos a cerca del 75% de la población española, y facturan anualmente más de 2.900 millones de euros. Con un empleo cercano a las 16.000 personas en este sector, las inversiones que realizan al año se contabilizan en torno a los 290 millones de euros. Un resultado realmente envidiable en el actual panorama de estancamiento económico. Con estas cifras es lógico que los inversores quieran participar del pastel a través de participaciones en aquellas empresas de agua que se han ido privatizando parcial o totalmente.
El agua de Madrid
El canal de Isabel II, empresa pública con 151 años a sus espaldas, lleva en el punto de mira de los inversores desde 2009, cuando se publicó en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid que se enajenaría hasta un máximo del 49% de la gestión de las aguas. El 45% quedaría en manos de la Comunidad de Madrid, y por un pacto fuera de esta ley al respecto, los ayuntamientos proclamarían no vender un 6% de su propio 20%, para mantener por ahora el 51% bajo control público. La crisis paralizó el proceso y aún hoy está ralentizado, momento que está aprovechando la Plataforma Contra la Privatización del Canal de Isabel II, para defender que este siga siendo 100% público a través de manifestaciones, actos informativos, debates, charla e incluso una consulta popular no vinculante el pasado 4 de marzo, en la que se recogieron 175.000 votos a favor de que el Canal siga siendo un ente público. El último intento es una petición a la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, para convocar un referéndum vinculante al respecto.
Pretendientes no le faltan al Canal. El vicepresidente regional asegura tener reuniones con “muchísimas empresas de todos los sectores” interesadas en hacer una oferta seria para comprar acciones de esta entidad cuando salga a Bolsa. Entre ellas empresas del agua, fondos de inversión y entidades financieras para un proceso que aún está en fase de evaluación. Mutua Madrileña ya mostró su interés, como lo hicieron en su día Aguas de Barcelona (Agbar), en manos francesas, ACS, Acciona y FCC. El resto no deberían tardar en hacerse notar públicamente si no quieren perder su baza.
El miedo de la privatización parcial entre los detractores se concentra en la posible subida de tarifas, a lo que el vicepresidente regional madrileño, Ignacio González, responde que “el agua es del Estado” y que los precios los seguiría poniendo la Autoridad Administrativa. Esto lleva a plantearse una posibilidad real de subida de tarifas, aunque no vinculada a la privatización. Sea de unos o de otros, lo cierto es que cada vez quedan menos argumentos para evitar un encarecimiento del agua, aunque sea ya solo por la sequía invernal que nos ha acompañado estos últimos meses y que ha dejado a los embalses madrileños al 65,6% de su capacidad frente al 85,66% en esta misma semana pero del año 2011.
