El ahorrador español no invierte a la ligera, cada vez busca más un asesoramiento profesional que le garantice un mayor rendimiento. Así se desprende de las conclusiones del estudio ‘Conocimiento y Valoración de los Asesores Financieros’, realizado por el Observatorio sobre el Asesoramiento Financiero de IEB e Inversis y presentado este miércoles 20 de marzo por Miguel Ángel Bernal, miembro del departamento de Investigación del IEB, y Carlos Moreno de Tejada, director general de Inversis Banco.

Según este estudio, el 97% de los españoles recurre a algún tipo de asesoramiento a la hora de tomar decisiones sobre su dinero, y en la mayoría de los casos (las dos terceras partes), lo hace acudiendo a más de un tipo de asesor. El estudio muestra además que los que quieren cambiar de asesor no buscan un coste menor, sino un mayor rendimiento, y que «tres de cada cuatro encuestados están dispuestos a pagar por dicho asesoramiento financiero», puntualizó Miguel Ángel Bernal.

El profesor del IEB añadió a su vez que «el ámbito online cobra cada vez más importancia», y que el asesoramiento financiero «tiene que ser una profesión cualificada, lo que explica que en momentos difíciles como los actuales, esta figura se podía haber deteriorado y no ha sido así». En este sentido, Carlos Moreno recalcó que «la preparación de los profesionales es fundamental para evitar errores del pasado» y que, precisamente, «está subiendo el interés en nuestro sector por conocer al cliente y ofrecerle nuevos modelos de asesoramiento».

Otra de las conclusiones destacadas del estudio apunta a que en 2012, los inversores españoles recurrieron principalmente a su entidad a la hora de buscar asesoramiento para sus ahorros, un 87% del total, frente al 54% registrado un año antes.

Pero, ¿cómo es el inversor español? El estudio configura un perfil medio en el que las mujeres estarían más asociadas al tramo de entre 20.000-50.000 euros, y los hombres al de 50.000-300.000 euros. Por ciudades, en Vizcaya, Málaga, Barcelona y Sevilla prima el tramo de entre 20.000 y 50.000 euros. El mayor porcentaje se encontraría en Madrid con una cantidad de inversión que superaría los 150.000 euros.

Para el ahorrador, los productos que deberían conllevar un servicio de asesoramiento serían la bolsa, los fondos de inversión y la renta fija, principalmente. En cambio, «el inversor en warrants es muy especializado y conoce la inversión, solo el 10% quiere asesoramiento», matiza Bernal.

En la presentación de las conclusiones del estudio también hubo tiempo para analizar la actualidad económica más candente. Carlos Moreno recalcó que la situación de Chipre no es extrapolable a España: «No va a afectar nada a inversores de depósitos en España», a lo que se unía Bernal puntualizando: «Chipre pone de manifiesto la necesidad de tener un asesoramiento financiero, hecho que aclara bien que España no es Chipre».