Este viernes 23 de noviembre se celebra el Black Friday en Estados Unidos, una jornada en la que las tiendas preparan jugosas ofertas y que supone, en la práctica, el inicio de la temporada de compras navideñas. Los elevados descuentos en productos de tecnología y moda, sobre todo, llevan a los estadounidenses a aguantar largas colas desde la noche anterior a las puertas de los grandes almacenes, con mantas y termos de café incluidos, en muchos casos.

En España la cosa no es para tanto, pero empresarios y comerciantes, que están sufriendo en sus márgenes los rigores de la crisis, se apuntan a una costumbre que puede alegrar la cuenta de resultados. No en vano, en Estados Unidos el viernes negro es, para muchas tiendas y grandes almacenes, el día de mayores ventas de todo el año. Aquí en nuestro país son muchas ya las empresas, grandes y pequeñas, que se suman a esta jornada. Fnacc ha anunciado que el viernes negro realizará un descuento del 21% en todas sus tiendas para ‘regalar el IVA a sus clientes’. Apple declara, en su página web, este viernes como ‘Día Especial de Compras’, y tiendas de moda como Stradivarius, Pull & Bear, Oysho o Zara Home ya han anunciado que realizarán descuentos y ofertas atractivas con motivo del black friday.

La crisis económica ha provocado que el inicio del viernes negro se adelante estos últimos años al jueves por la tarde-noche para tratar de conseguir el mayor número posible de ventas, de forma que cada vez más jóvenes se plantean dejar familia y pavo de Acción de Gracias en la mesa para irse a hacer cola y poder comprar el último videojuego y la ropa de moda con la mejor rebaja. Este año, los empleados de Wall Mart han adelantado que realizarán una protesta para reclamar a la empresa que no les haga trabajar, además del black friday a destajo, el día anterior, jornada de Acción de Gracias. Precisamente este viernes 23 de noviembre se celebra también el Día Mundial sin Compras,  una jornada mundial de protesta en la que se invita a toda la población a no consumir con la finalidad de denunciar el actual modelo de producción y consumo, y promover formas de consumo alternativo.