Publicado en Expansión.

Los segmentos defensivos, como el de telecomunicaciones y energía, ganan protagonismo. Pero las compañías con exposición al ciclo, como bancos y aerolíneas, siguen manteniendo su atractivo.

La crisis de Ucrania y los temores en torno al crecimiento de los mercados emergentes han reavivado el interés de los inversores por los sectores más defensivos. Así, las compañías de telecomunicaciones, las de servicios públicos (utilities) y las petroleras vuelven a ganar protagonismo. En muchos casos se trata de valores que se han quedado rezagados en Bolsa en 2014, ya que la consigna en los primeros compases del año era apostar, casi exclusivamente, por sectores de corte cíclico para aprovechar la recuperación económica.

Las compañías del sector de servicios públicos, como es el caso de las eléctricas, suelen suponer un refugio en tiempos de turbulencias, ya que se caracterizan por la estabilidad y el carácter predecible de sus ingresos. Además, estas empresas han vuelto a ganar atractivo una vez superado el nubarrón de la reforma regulatoria. «En España lo podríamos dar por cerrado. Ahora las dudas regulatorias se abren en Alemania y Reino Unido», señala Pérez. «La incertidumbre regulatoria ya está bastante descontada. En todo caso, el mayor impacto se centra ahora en las renovables, pero no todas las compañías tienen una gran exposición a este segmento», comenta Fernando Hernández, de Inversis Banco.

Entre los bancos de ámbito exclusivamente nacional, desde Inversis destacan a CaixaBank y a Liberbank. La entidad catalana, que ganó 152 millones de euros en el primer trimestre, ha anunciado que volverá a pagar el dividendo en efectivo a partir de 2016. El valor escala un 17,6% en 2014, hasta los 4,45 euros. En cuanto a Liberbank, la entidad ha confirmado esta semana su intención de ampliar capital en 500 millones de euros para amortizar de forma anticipada la deuda suscrita por el Frob y así poder comenzar a remunerar a sus accionistas en los próximos ejercicios (el banco tenía prohibido el pago de dividendos hasta que no devolviese las ayudas).

La cotización del banco sube un 29,17% en el año, hasta los 0,93 euros. En Europa, el favorito de Inversis es BNP Paribas. La entidad gala, que cae un 7,36% en 2014, hasta los 54,48 euros, cotiza con un descuento del 16% respecto a su valor en libros, según el consenso.

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