• Los datos económicos mostraron una inesperada aceleración de la actividad en servicios y en manufactura.
    • Servicios: ISM no manufactura de gerentes de compra aumenta a 56,7 (desde 55,3)
    • Servicios: ISM no manufactura de Business Activity aumenta a 59,9 (desde 56,1)
    • Servicios: ISM de empleo no manufacturero aumenta a 49,1 (desde 47,4 anterior)
    • Servicios: ISM servicios New orders aumenta a 59,9 (desde 55,6)
    • Manufactura: Ventas de coches en 2,790 M (desde 2,720 M en junio)
    • Manufactura: Venta de camiones aumenta a 10,560 M (desde 10,28 M)
    • Manufactura: Factory orders +2% m/m (aumenta desde el +1,6%)
  • Inflación: Hubo un dato esperanzador, que sugiere un cambio de tendencia.
    • ISM Prices paid, se desacelera fuertemente a 72,3 (desde 80,1 anterior)
  • FED: En su particular lectura de todos estos datos, el presidente de la Fed de San Luis, James Bullard, reiteró en una entrevista a la CNBC la firme determinación en continuar los esfuerzos por llevar la inflación al 2%, y descartando al mismo tiempo que la economía esté en recesión. La presidenta de la Fed de San Francisco, Mary Daly, habló en el mismo sentido (descartando recesión) y dijo en una entrevista con Reuters que un aumento de 75 puntos básicos podría ser más apropiado. Jerome Powell, se mostró en la misma línea: “podría ser conveniente otro alza inusualmente grande en septiembre si los precios no se reducen lo suficiente”.
  • Mercados: La rentabilidad de los treasuries tocaba máximos de dos semanas: 2 años al 3.03% y 10 años al 2.80%, aunque se mantienen en niveles absolutos muy bajos. En equity, sigue el buen tono, y el S&P acumula ya un 13% desde los mínimos de junio, mientras que el Nasdaq acumula un +19%. Mientras el fantasma de la recesión se mantenga fuera del radar (cosa que parece), el buen tono puede continuar. A ello contribuye también un mejor tono del entorno exterior (con los primeros acuerdos de exportación de granos en Ucrania), que abren la puerta a la esperanza de nuevas negociaciones que quiten presión a las materias primas.

Álex Fusté

Economista Jefe Global de Andbank