El mercado ha puesto en el punto de mira a España. Desde el jueves, la prima de riesgo ha llegado a elevarse hasta los 642 puntos básicos. La rentabilidad del bono español se ha ido hasta el entorno del 7,5%.

Fernando Hernández, director de Gestión de Inversis Banco, explica: “El mercado no se acaba de fiar del binomio del rescate a la banca española y el rescate del Estado, que tiene problemas, a las comunidades autónomas. No le acaba de cuadrar el puzzle”.

Lo relevante, señala, es que “el mercado no quiere oír hablar de nuestra deuda”. “Hay que buscar algo que genere confianza: comprar deuda de forma directa, generar con reuniones o declaraciones un flujo de noticias positivo, etc”, agrega.

No obstante, es difícil sostener que el comportamiento tiene un sustento económico detrás. “Está fuera de lógica. El problema no es tanto el déficit, y la deuda que genere, sino si España va a ser capaz de crecer en los próximos años. Está claro que este año y el próximo no, pero es relevante si es capaz de hacerlo en los ejercicios siguientes y generar así ingresos”, comenta Fernando Hernández. “La situación de las finanzas públicas no es explosiva. Y es sorprendente que Portugal haya tenido rentabilidades inferiores”.

Próximas semanas clave

¿Cuánto tiempo puede aguantar España en esta situación? “Estamos en un punto de no retorno. El interés que se ha disparado es el que marca el secundario, no el de emisión. Es necesario que en tres o cuatro semanas esto cambie, porque a partir de septiembre habrá que emitir deuda de forma alegre. Se necesita que bajen el interés de las emisiones de todos los plazos. Sino, será difícil seguir adelante sin algún tipo de ayuda”.

Prohibición de posiciones cortas

España prohibió este lunes las posiciones bajistas en todos los valores de la bolsa durante tres meses. El Ibex frenó la sangría y cerró con pérdidas de un 1,1%, cuando llegó a hundirse un 5,4% hasta los 5.905 puntos. Finalmente la sesión expiró en 6.177,4 puntos. “No me parece mal”, opina Fernando Hernández. “Suaviza los efectos del problema en momentos como éste, aunque no lo arregla. No está mal como medida transitoria”.